Antes que nada, para
quienes el verbo garchar no les resulta familiar, les comento que
significa lo mismo que “coger” en el sentido más vulgar que
pueda tener. Y por si quedan dudas, no, no estoy diciendo
coger=agarrar=tomar.
Advertencia a posibles jugadores: Todo el contenido del siguiente post está lleno de SPOILERS del juego, si no lo has jugado, y tienes intenciones de hacerlo, y no quieres que te lo arruine, no leas.
El Juego se supone es de
roll. No creás exactamente tu propio personaje, pero utilizás a
Geralt de Rivia, un "hechicero", que en realidad es más un guerrero
cuerpo a cuerpo con algunos conjuros moderados que te ayudan en la pelea, y que
es capaz de utilizar pociones de alquimia que crea. Esas pociones le dan poderes y resistencias gracias a que los hechiceros son algo así como magos "mutantes". Es un poco más complejo pero dejemoslo ahí. Nacés mago en este mundo, pero
luego te alteran genéticamente a base de pociones y te hacen
"hechicero", cuyo único objetivo es cazar monstruos para
proteger humanos. Son básicamente mercenarios de monstruos, bah.
La trama resulta
interesante, y el conflicto político es aceptable. Tomás decisiones
cuyas consecuencias ves mucho después y le da bastante realismo a
este universo.
La jugabilidad es un poco complicada, hasta que uno logra acostumbrarse. Pero nada
que sea imposible. Es más, el diseño de las peleas es exquisito. La
potencia, los movimientos, los saltos. Todo está muy bien detallado
en los movimientos de Geralt, es casi ver a un artista de Kung Fu en
un videojuego. Me gusta muchísimo.
Pero... Siempre el Pero
principal...
Pero el juego no es todo bonito. Las personas con un poco de noción de lo que es la
misoginia y el sexismo van a llorar de indignación en ciertos
momentos del juego. Y no, no es sensibilidad o lo que sea. Es
demasiado evidente en este juego. Sería muy estúpido no notarlo.
Pasaré a relatarlos.
Antes que nada el atuendo.
El clásico problema de casi todos los videojuegos que evita que
juegue personajes femeninos, simplemente porque me gustaría que mi
guerrera luchara armada. No en tanga, no con un escote donde
pareciera que cualquier embiste le haría saltar una teta, no en
pelotas, y no en ropas mega ajustadas para poder verle el culo
delineado.
Pero siguiendo con la
idea, el diseño de un determinado ítem que se ve en un personaje masculino puede parecerme genial. Un ejemplo de ello es la toga tevinterana del Dragon Age. Adoro esa toga. Sin embargo, al usarlo un personaje femenino, la ropa
“mágicamente cambia”, y aparecen escotes y tajos en las piernas
que no estaban en las versión masculina del atuendo. Ver versión masculina y femenina. Odio que pase
eso. Ninguna mujer compra una corbata y al ponérsela le “queda”
un vestido de noche con escote hasta el ombligo. Sí, ya se, tampoco
en nuestro mundo existe la magia ni los dragones, pero no es el
punto.
The Witcher no es
diferente. No es que puedas ponerte items más allá de las armas,
pero las vestimentas que ves son evidentes: escotes hasta el ombligo,
escotes con armazón así las tetas están más levantadas (nadie
puede hablar con una botánica si ésta no muestra cómo se le
van a reventar las tetas), o vestidos de fiesta que, sin escote,
tienen un “escote trasero” que les llega por la mitad del culo,
cosa de que puedas verle lo bien definida que tiene la raya. Aún no
enfrenté a una “guerrera” meele, pero seguro, está en tanga...
o quizás ni eso. Bajo algún rebuscado argumento, capaz puede pelear
en pelotas. “Las armaduras reducen la agilidad”. Ah, si. Todo
perfectamente lógico.
Primero y antes que nada,
el universo de Temeria (este país donde Geralt está y hace sus
misiones y caza monstruos y todo eso) tiene muy incorporada la idea
de que las mujeres están más "inclinadas" para la magia
y la hechicería. Yo siempre me pregunté a qué era debido esta
extraña idea donde la magia: algo tan etéreo, preferiría a las
minas antes que los chabones. ¿Por qué no le da igual?. Me quedó super claro en este juego: Las tetas son espacios extra para almacenar maná. No me cabe la menor
duda. (?)
Para subir de nivel y
seguir la historia de este mundo fantástico tenés que hacer quests
o misiones de forma de obtener experiencia (abreviado XP). Dioses.
¡Existe cada misión espantosa!. Muchas de ellas, que NO son
secundarias, o sea, sí o sí las necesitás hacer para continuar el
desarrollo de la historia, incluyen el garcharte minas comprándoles
"el favor" con dinero, con regalos o con poder
(mostrándoles algún anillo de alguna autoridad pertinente).
Con cada mina que te
garchás, te ganás una carta-imagen-cuadro en un "hermoso"
diseño artístico-pornográfico de la mina. Ni siquiera es un poco
"erótico". Minas con piernas abiertas en pelotas no es
artístico. Y no, no soy mojigata. A mi no me importaría si el juego
tuviera alto contenido sexual e hiciera lo mismo con los tipos. Pero
no. Ellos siempre cubiertos y con togas, y armaduras, y tan
honorables y perfectos. Las minas siempre son las locas, putas y
reventadas. ¡Novedad!.
Además... Por cada
encuentro sexual con una mina, te dan una “carta”. Casi es una
invitación a “coleccionarlas”. El concepto de “coleccionar
mujeres porque soy un capo” no se me escapa con esta “sutileza”.
Y sí, lo se, demasiadas comillas.
Luego averigüé que esta
colección de cartas es un “mini-juego” inocuo. Podés
coleccionarlas todas, como lo suelen hacer los gamers más estrictos,
pero no agrega nada al juego. No ganás un poder extra, no aumenta el
impacto político de tus acciones, ni siquiera ayuda a que la mina en
cuestión sea más o menos susceptible a tus acciones dentro de este
mundo. Es un juego que sin servir para nada, está allí. ¿por qué?
Los mini-juegos suelen dar recompensas menores ¿si no sirve para
nada, porqué esta allí?. Los diseñadores se defendieron diciendo
que es “opcional”, pero como muchos gamers recalcaron, si tan
preocupados están por la “opción”, ¿por qué no hicieron un
mini-juego igual con tipos?. El río de comentarios homofóbicos al
respecto no se hizo esperar. Una vez más los diseñadores dijeron
que esto no era posible porque el juego está basado en una serie de
libros y en ellos Geralt no le interesan los hombres. Me pregunto que
tan fiel a la historia original puede ser un juego de rol donde
puedes tomar dos bandos diametralmente opuestos y seguir hablando de
“basado en un libro”. Pero esto es un dato extra más.
También existen
situaciones bizarras. Una de ellas se da cuando tienes que hacer una
quest con unos druidas. Te caminás la vida en una ciénaga para
llegar al santuario. Allí hay más de seis viejos barbudos tapados
con togas marrones franciscanas de pies a cabeza. Y entre ellos ves a
una dríade: una mina verde en pelotas - sí, sí, en pelotas, con
las tetas al aire que se le mueven como gelatina cuando habla (???) y
ni se gastaron en ponele un taparrabo... ¿para qué?. No hay nada más
reconfortante que hablarle a una mina con toda su mata al aire y sus
tetas semovientes - . Insisto, esto es desagradable. El concepto
“artístico” ni lo sospechan los diseñadores de estos
personajes.
Luego tenés que ir a
hablar con una chica en un prostíbulo porque su hermano preocupado,
desconoce su paradero. Después de toda la verborragia sobre "ella
es una chica decente y nunca acabaría en un prostíbulo" y toda
esa sarta de pelotudeces de mujeres santas y virginales, vas al
lugar, la encontrás y no tenes otra forma de resolver la quest que
acostándote con ella. Sí. Te la tenés que garchar para saber si es
o no la hermana del flaco. ¿La razón?: Tenés que ver si la chica
tiene una marca en el cuello. No importa que la mina esté en
cuasi-pelotas mientras te habla, sos tan pelotudo que no ves la marca
en el cuello hasta que no la garchás, lo cual sólo podés hacer si
le regalás un zafiro, 500 oros o le mostrás algún anillo imperial.
Lo usual en casi todos los garches del juego.
Luego, al final de esa
quest sale un sermón sobre que las mujeres gustan de ser las "diosas
de la noche", dar su juventud y su “carne” a los hombres
que, por disfrutarlas, entregan todos sus bienes y se vuelven locos.
Todo bien que lo diga una madame vampiresa mega-linfómana (que
también tenés que garchártela como forma de aceptar su
agradecimiento por defenderla, ya que la otra opción es matarla, y
yo no pensaba matar a la esposa de mi mejor amigo vampiro fallecido en combate) pero cuando el discurso excede el pensamiento particular
de un personaje, y se muestra como concepto general, como
"conocimiento de sentido común", todo se va
irremediablemente a la mierda.
Cuando hablas con una mina
pre-garche, tenes diálogos y "opciones" apabullantes.
Ejemplo:
"Mina random que
pertenece a la quest principal se te insinúa". Opciones a
contestar:
- Que buenas tetas, loco.
- Que deliciosas manzanas,
jovencita. (Máster en eufemismos....¬¬)
- Tu belleza no rivaliza
con nada en este mundo.
- Tengo cosas interesantes
que mostrarte.... en la cama.
- Um... Bebamos (así te
la garchás borracha).
¿Por que? ¿por queeeeeé
en todas estas apestosas opciones no hay una donde le diga algo
diferente?, aunque sea una de las siguientes opciones:
- No, flaca, estoy
salvando este conchudo país de monstruos espantosos, resolviendo
conflicto internos políticos en los que estoy hasta la pera metido y
que me es imposible ser neutral, y de lo que menos tengo ganas ahora
es de garcharte para seguir el hilo político de esta quest. Me paso
tu insinuación por el forro del culo, a vos y a todas las minas de
esta ciudad conchuda. (conste, sólo logré hacer esto con una, con
la mina que “curás” al comienzo del juego cuando te la
reencontrás, pero sospecho que no cuenta... snif. )
- No, no estoy interesado
en las mujeres. (Snif. Me mal acostumbró Dragon Age, he de decirlo.
¡Quiero más personajes LGBTA en los videojuegos!)
- No, hice un voto secreto
de castidad y autocontrol, para mostrarle a la sociedad que no soy el
monstruo que creen que soy.
- No, no tengo ganas (algo
tan simple....)
- No creo que
debamos...(evasivo)
No se, alguna otra opción
para que no te acuestes con la chabona. Encima luego te obligan a
darle regalos de compromiso. ¡Yo no quiero comprometerme con ninguna
de esas locas!. Pero no, tenés que hacerlo sino la quest no sigue. O
al menos si hay otra opción es más complicada porque no pude
evitarlo:
Mina: Adoro las rosas. Sus
colores muestran significados. Las rojas son del amor por ejemplo...
Yo: Ok, me caes bien. Sos
una médica que se quedó en este país cuando todo el mundo emigró
por miedo de la peste bubónica. Te la re bancás y sos una amiga de
hierro que me ayudó en montón de quests. Toma una rosa blanca.
Mina: Las rojas son del
amor por ejemplo... (nunca aceptó la rosa blanca)
Yo (mirando el
inventario): ¿por que no aceptás? lrpm. Loco, ¡esto es extorsión!.
Mina: Las rojas...
Yo: basta... quiero seguir
la quest, tomá la conchuda rosa roja....
Mina: ah, que belleza, no
sabía que tuvieras esos sentimientos por mí...
Yo: ¬¬ te odio.
Continuando con la escena
de garche.
Claramente no es con todas
las minas así, pero si con muchas, donde las opciones
de diálogo parece que van a ir por un camino de planteo y diálogo
profundo y desembocan en situaciones donde, aparentemente si no lo
sospechas dos diálogos antes, no hay forma de negarse.
Nota de color: en los
pueblos, tenés niñas y niños pobres rondando por las calles. Si
hablás con ellos, los niños usualmente hacen referencia a tu
extraña apariencia mutante . Lo cual es lógico, no todos los días
ves a un tipo de pelo largo blanco y ojos de gato amarillos. Pero si
clickas a las niñas, muchas de ellas dicen "cuando sea grande
quiero ser ramera". Y esta idea está demasiado generalizada en
el juego. Es casi un continuo machaque a la nefasta frase de “todas
las mujeres son putas”. En las quests lo ves. Y es molesto. No hay
lugar para el planteo de la libertad sexual. Para nada. No hay
personajes que te rechacen. ¿Quién rechazaría a un hechicero
musculoso y misterioso que se las sabe todas?. Claramente nadie. Sos
el prototipo de macho a lo Rambo, pero con pelo blanco.
El personaje de la mina
que vas a buscar al prostíbulo es una chica que la familia dio en matrimonio a un fulano y, según sus palabras, “no quería servir
a un viejo decrépito el resto de mi vida, prefiero ser una dama de
la noche, donde todos me desean y por la cual todos quiebran”. Ok.
Casi pensé que planteaba una a favor de las minas. Aquello era un
acto de liberación en este mundo donde, no me jodan, las mujeres
están tan oprimidas como los no-humanos. Pero me equivoqué cuando
la patrona linfómana vampiresa salió con su argumento de que las
mujeres son todas putas de nacimiento. Además, el argumento de la
chica también es flojo... No se hizo ramera por querer tomar su
libertad en sus propias manos. No. Era nomás para que la adorasen.
Para que los otros hombres le dieran valor. Una vez más, la
necesidad de la presencia de un hombre – o varios – para darle
significado a la vida de una mujer.
Y hasta el momento, aquél
fue el único lugar donde capaz se podía replantear el rol de la
mujer y su libertad en este universo de fantasía. Fail total.
Y aquí voy a plantear algo que leí en foros. Muchos jugadores piensan que porque el juego esté ambientado en la época medieval (cosa que es totalmente falsa, porque es un mundo fantástico épico, no la Europa del siglo XIII) es estúpido hacer notar el sexismo que tiene. El problema es que, si en verdad querían mostrar un mundo donde la opresión también daña a las mujeres, deberían hacerlo bien, entendiendo la resistencia, dándole personalidad, libertad y rebeldía a muchas. Con las razas no-humanas lo hicieron muy bien. ¿Por qué no con las mujeres? respuesta: porque no les importó, no les interesó hacerlo. Así que no justifiquen algo que ni los mimos diseñadores pretendieron. Esa es la realidad. El juego muestra una completa naturalización de las mujeres oprimidas: a nadie le importa, y ellas están bien con eso. No ves ni una revelándose. Las mujeres de este universo de fantasía están ahí sólo para ser salvadas o para ser garchadas. Objetos decorativos, objetos delicados y frágiles que deben ser salvados, o a lo sumo, malvadas y codiciosas putas. No existe otra visión de la mujer en el juego.
Luego tenés los
comentarios típicos sexistas. No puedo decir que este universo
“alterno” que crearon para The Witcher fuera muy creativo y muy
“fantástico”. Entre esas “originalidades”, tenés cosas
como: " Las mujeres no dicen lo que quieren, son misteriosas,
nadie las entiende, dicen si cuando es no, etc". Toda esa sarta
de pelotudeces en casi TODOS los personajes. Siendo un momento de
gloria de la pelotudez misógina una quest donde vas con tus mejores
amigos a la taberna. Tu mejor amigo enano que está casado hace
montón de años y tu amigo humano bardo, poeta, músico y amante
compulsivo de todas las mujeres del pueblo. Con esos dos “capos”
te vas de borrachera, y luego de filosofar diciendo las mismas
pavadas de siempre, te preguntan si querías comprometerte con una
mina del juego. (¡por dios! ¡Yo nunca quise siquiera acostarme con
alguna de ellas! ¡Mucho menos casarme y robarme un pibe para que
parezcamos la familia tipo feliz!... ¡por dios! ¡Soy un hechicero
mata-monstruos y estoy en el medio de un lodazal de mierda política,
lo que menos me interesa es si la mina A, la B o la C quieren casarse
conmigo!) . Al finalizar la cháchara, tus amigos no tiene mejor idea
que irse de orgía al burdel de la vampiresa linfómana. Lo bueno es
que te dan dos opciones: “Sí, vamos” y un misterioso “Um”. Y
el “Um” parece ser una especie de negación, por lo que pude
escaparme. ¡Al fin me liberé de un garche! ¡Deberían darte un
logro por esto en el juego!.
Los únicos que hasta el
momento no dijeron pelotudeces sexistas son los elfos, los grandes
revolucionarios del juego. O al menos, eso aparentan. Sino todo lo
contrario. En los momentos más críticos el líder de los elfos (Yaevinn)
rememora a una guerrera elfa bravía e inteligente que lideró las
batallas más cruentas de su raza, y los acompañaba con fervor
guerrero, con honor, con dignidad. Hasta el momento no he escuchado
que nadie hablara en particular de su “belleza” o de sus tetas.
Siempre aluden a su capacidad de guerra, que, en este caso, es todo
lo que compete a la imagen de la elfa. Una vez más me vuelven a caer
muy bien los elfos revolucionarios. Al menos, de momento.
Como nota extra, cabe
mencionar que en este mundo se simula que la homosexualidad no
existe, y aunque sí existe, los pocos comentarios al respecto que se
pueden escuchar en el juego tienen una respuesta absolutamente
negativa y agresiva. Incluso Geralt, lo cual es
extraño si pensamos que es un hechicero que defiende todas las
causas de coexistencia pacífica a pesar de las diferencias (al menos en la forma en que lo estoy jugando actualmente).Y en última instancia, es tu propio personaje, y uno debería poder elegir qué es lo que opina al respecto... ¿no es algo que debería ser opcional?
Continuando con el juego,
te encontrás con argumentos y desenlaces garcheros inesperados. Y
situaciones de las más bizarras donde vos, Geralt de Rivia alias “el
pajero número uno de Temeria”, no tiene mejor idea que proponer
situaciones de intimidad con la mina random que aparece por ahí.
Un ejemplo de ello son los
siguientes:
La Diosa del Lago. Una
diosa posta. Su canto puede traer la paz o el caos al mundo. La mina
es copada, busca el camino de la coexistencia de las razas. Me cae
bien. Menos su atuendo, me cae bien. Bah. “Atuendo”, por decirlo
de alguna forma. Tener algas en el culo, en el frente y en las tetas
no es un atuendo, pero al menos no está taaaan desnuda como la
dríade, y no se le mueven las tetas al hablar. La gente que diseñó
esa mina no conocía tetas reales. Esas tetas aparecerán en mis
pesadillas, doy fe.
En fin. La diosa es toda
buena onda, hasta que te tira los perros. Cuando lo hace, sale con
argumentos del tipo “las mujeres necesitan siempre de
los hombres... ya sea para comida o protección”. Claro, sos una
diosa que tenés el poder para mandar el mundo a la mierda pero te
parece que, como tenés tetas, vas a necesitar siempre a los
hombres.... por "protección". Oh, sí, lógica.
Luego sale con el rollo de
que es una diosa y está cansada de ser adorada, de que siente
soledad y en el fondo, intenta mostrar que no es muy diferente de los
humanos. “Genial” me dije. La mina está planteando la necesidad
de relacionarse con otras personas, de explorar sus sentimientos en
la misma forma que los humanos, y que por más que sea una diosa,
tiene sus necesidades emocionales. Buen punto. Después de todo los
dioses crearon a los humanos a imagen y semejanza... Pensamiento
profundo.
No. Ingenua que fui. La
Diosa estaba cansada de que le adorasen sus cualidades: su sabiduría,
su inteligencia, su alma en general. Quería que le halagaran su
físico. Y vos, que sos el pajero número uno de Temeria, no se te
ocurre nada mejor que piropearle el trasero. Algo así como que el
trasero de la diosa era la envidia del universo. Encantador. Todo un
ganador. La diosa le re cabe y luego te da dos opciones para hablar.
Una donde decís que volvés al pueblo donde estabas haciendo las
misiones, y otra que querés emprender una misión de características
personales y filosóficas. Loco. Me re caben las misiones
filosóficas, ¿cómo no la voy a elegir?.
No se por qué demonios
esa opción te hace terminar garchándote a la diosa.
Yo se que en la vida real
no tengo capacidad para enterarme de las sutilezas y las indirectas
de esta índole. Se me escapan todas. Lo asumo. Y ahora asumo que se
me escapan todas incluso en los videojuegos. Eso explica por qué en
Dragon Age 2 ni me enteraba de los perros de Anders hasta que se me tiró encima (si, triste,
triste, juro que siempre pensé que estaba hablando de Justicia y lo que no podía controlar era a Venganza...)
Otra situación de
desenlace inesperado se da en un campamento élfico. En mi "playgame" yo soy pro-elfos
y pro-revuelta, así que les doy una mano. Los pobres están huyendo
de las tropas, se encuentran famélicos y enfermos y les llevo
provisiones. Les entrego pan y carne a cada uno. Quiero que se
restablezcan para dar batalla en la próxima oportunidad que tengan,
y lo hagan en buenas condiciones. Las revoluciones no se ganan sólo
con esperanzas.
Pero al hablar con una
elfa maga la cosa cambia. Abre un
diálogo donde se plantea el asunto de la superioridad que los
humanos muestran cuando entregan comida a una unidad famélica de
elfos. Yo le comento de que ni soy ni humano (soy un hechicero
mutante, por si los ojos gatunos amarillos y el pelo blanco no te lo
permite sospechar, flaca) ni pretendo mostrar superioridad,
simplemente ayudo a una unidad cuya lucha apoyo. La mina me discute
un par de puntos más muy interesantes y sin que pueda controlarlo
termino revolcándome con la elfa. ¿Que parte del “sólo quiero
ayudar dando comida a un grupo que apoyo ideológicamente” no se
entiende? ¿Porqué la elfa debe pagarme con sexo? Es espantoso.
Urgh. Detesto que las opciones de diálogo no sean siempre tan
evidentes.
Y lo peor viene con la
líder de esta unidad élfica: Toruviel. La líder del grupo es una elfa
guerrillera que, hay que hacerlo notar, viste como una
persona-guerrillera-normal. Es decir, no anda en tanga, no anda con
las tetas al aire ni el culo escotado. Tiene una ropa completamente
adecuada para la guerra: pantalones largos, camisa con protectores de
cuero (sin andar mostrando el ombligo), con un peinado adecuado para
pelear (no con una cabellera hasta la cintura y brashing) y sin
maquillaje (no vas a la guerra con labios rojos y sombras verdes...
vamos, y si fuiste así, no dura más de una hora de pelea).
La líder al igual que
vos, busca la coexistencia de las razas, la libertad y todo el rollo
revolucionario buena onda, a pesar de entender que los únicos
métodos que encontró son los que está usando y capaz no sean los
mejores. Muy razonable, para nada estúpida ni fanática y lidera su
unidad con fuerza.
En medio del
enfrentamiento final, donde el levantamiento está totalmente fuera de control, los no-humanos pelean encarnizadamente con las tropas de seguridad local por las calles del pueblo, el reino incendiado y colapsando,
saqueadores por doquier, sangre y golpes por aquí y por allá,
escapás con ella al refugio de la guerrilla. Hay que planear el
ataque final. La misión dice que tenés que hablar con ella
personalmente. “Alta táctica nos vamos a mandar”, pienso. Fail.
Llegás a su cuarto (¿por
qué su cuarto? Eso hizo espabilarme. ¡Ya le estoy tomando la mano!,
jaja) y la mina empieza a hablar de que le cambiaste la visión de la
realidad con tus acciones y tu apoyo a la causa. Y en medio de
semejante discurso emocional-ideológico, vos, el pajero número uno
de Temeria, la mirás con lujuria. La mina no lo puede creer. Yo,
player, tampoco.
Afuera tenés dos tropas de
seguridad local arrancándole la cabeza a las unidades de resistencia
revolucionaria, tenés una princesa maldita transformada en un
monstruo rondando por el reinado comiéndose a todo humano, problema
que tenés que resolver rápido por las connotaciones políticas que
implica, a su vez tenés que pensar en hacerte una armadura mega
especial porque la princesa te va a dar de forma que no querés
averiguar hasta que no tengas esa protección, y en medio de todo el
caos que se produce en frente de la casita que estás usando como
refugio, ¿no se te ocurre mejor idea que querer garcharte a la líder
de la resistencia?. ¡Por todos los dioses y demonios!.
Quiero creer que la
historia del libro no es así. Si es así, el autor, y los
diseñadores del videojuego debieron haber jugado Dragon Age para
aprender a hacer esas cosas bien.
No hay ninguna lógica,
sentido, ¡nada!. Impresentable. Igual es opcional en este caso. La
elfa es directa y podes decir “tal vez este no es el momento
apropiado”. No, flaco, no. Estar en medio de una revuelta no es el
mejor momento para garchar.
Conclusión: Si sos una
persona con capacidad de percibir el sexismoy la misoginia, te vas a
enfermar con más de una situación que ocurre en el juego.
Objetivización, generalización, sexismo, prejuicios y misoginia en
general es lo que encontrás cada vez que aparece una tipa en el
juego. Sea enemiga o amiga, siempre habrá una escena donde digan o
hagan algo misógino. Y luego un garche. Patente.
A menos que tengas el
filtro de resistencia, como suelo prenderlo yo cuando juego estas
cosas, no es recomendable. Con juegos como estos veo el maravilloso
trabajo realizado por Dragon Age Origin, no sólo en el aspecto de
concepción social y cultural interno, sino el juego en sí.
En Dragon Age Origin (no
el 2, donde patinaron feo) tenés una real equidad de género,
sacando los personajes o las culturas misóginas ficticias del mismo. Pero son “culturas”
o son “ personajes”... no es “sentido común” en ese mundo
de fantasía.
No sé cómo sea Witcher
2. Claramente dudo que la misoginia desparezca. Y dudo que no lo
vaya a jugar. La historia política me gustó. El mundo, sacando esos
detalles, es interesante y plantea situaciones de doble moral muy
buenas. Existen historias bellísimas para rescatar de personajes admirables, como
el caso del Guarda Vincent que de noche desaparece de forma "sospechosa". Geralt puede desconfiar poderosamente de esta actitud a puntos críticos a lo largo de toda la primer mitad del juego. Uno
esté tentado todo el tiempo de matarlo por su actitud que no queda
para nada clara. Pero al final descubres que el flaco es un
hombre-lobo que de noche cuida los barrios pobres y que por más que
le dices que puedes curarle la maldición, se niega porque así
ayuda más eficazmente. Más aún, descubres que fue el que te protegió a lo largo
de todo el juego durante mucho tiempo, cuando sospechabas que alguien
te seguía de noche o cuando te resultaba “extraño” que no tuvieras ataques
de la organización que quieres destruir cuando merodeabas las calles de la ciudad. Este flaco (Vincent),
resultó ser un monstruo honorable, cuidado los barrios de los
humanos olvidados. Y si lo matas o lo condenas, no sabrías nunca su historia. Ejemplos como estos permiteni replanteos interesantes a lo largo del juego, cuestionándote qué es lo bueno o lo malo, qué es lo honorable y lo digno.
Sólo mantengan a las mujeres lejos porque parece que de ellas no se
puede esperar más que sexo y ambición...
Advertencia final: Lamentablemente estos planteos sobre The Witcher 1 se realizan en foros donde escriben en inglés. Ninguno en español. Como es habitual, falta este tipo de cuestionamientos en lengua hispana. Siempre. Por eso me vi obligada a escribir la entrada. Así que advierto de antemano, si no has leído todo, si no has entendido lo que escribí, si no te cuesionas ni un poquito lo que estoy explicando (deberías, por algo juegas este tipo de juegos, ¿no?) y te perturba que hable del sexismo y la homofobia del juego, ni te molestes en escribir un comentario puteandome o degradando alguna de mis capacidades. Tienes más de 300 foros con una amplia mayoría pensando igual que tú, donde podrías congeniar mucho mejor.
Y lo digo porque me aburro de recibir mensajes de odio, que por cierto, me tienen sin cuidado. No voy a perder el sueño porque me digan reprimida o vaya uno a saber qué groserías simplemente por exigir reflexión del juego predilecto del lector/a-fanáticx del momento.
He dicho.
Sí, ¡Aguante Yaevinn!
1 Oscuridades:
Hola! Dejame decirte que tienes toda la razon. El juego tiene ese enorme "PERO" que hace que sea muy desagradable por momentos. Tu articulo es genial, disfrute mucho leyendolo ( me hiciste morir de risa ) Gracias.
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