Índice
La base de mi NO exageración
Las diferencias ficticias
Las sutilezas del machismo: caballerismo y adoración femenil.
Los extremos del machismo: violaciones, violencia, homofobia y prostitución
Últimas consideraciones
El motivo de esta entrada es simple: me he cansado de que la gente que se llama progresista, que alega que apoya la REAL igualdad de género, o que se indigna de la generalidad a la que se someten a todo individuo diariamente, sea también la que señala con el dedo a los que apuntan con el mismo dedo. Y no es que todo el mundo sea un santo en el asunto de apuntar con el dedo. Muchas veces se comete la equivocación de apuntar y criticar lo que sin querer también se hace, pero lo importante es reconocer el error, formar conciencia, percatarse de las cosas y actuar en busca de la mejora – y de la coherencia - . En cualquier caso buscar el cuestionamiento.
El cuestionamiento permanente es el único arma que como seres humanos, tenemos para derrocar roídas costumbres. Lo que más hay que fomentar en este mundo es el espíritu crítico, aquél que mira las cosas, y pregunta el porqué de tales cosas, la esencia de las mismas, y cuestiona si en verdad lo establecido es lo correcto, poniendo incluso en tela de juicio el concepto ‘correcto’. No es algo que sea fácil de realizar, y menos aún de alcanzar la maestría en el arte del cuestionamiento. Quienes eran hábiles con él se denominaban ‘filósofos’ en esencia, por su actitud perspicaz ante los hechos que se asumen como ‘naturales’ o a los que estamos ‘acostumbrados’. Por eso me genera un leve rechazo ver que gente que considero como tal en ciertos aspectos, a veces, resulta muy básica en otros. Y tal vez en los más esenciales, no con mala intención, desde ya, pero sí con un reducido nivel de auto-cuestionamiento o cuestionamiento a lo preestablecido en cuanto a temas morales y éticos como lo son el racismo, el sexismo, etc.
Mucha gente se exaspera de ser metida en estadísticas generales, que no reflejan para nada su ser. Indignadas, despotrican contra las masas: aquellas personas que siguen los roles, los estándares; que aceptan las cosas tal cual la (in)cultura imperante les hace creer y actúan en consecuencia, actúan como quiere el sistema que actúen. Pero es curioso cómo asumen a su vez ‘estándares’ a los cuales no les aplican su sentido crítico, en parte, porque como animales sociales que somos, indefectiblemente TODOS los seres humanos estamos sometidos a ‘normalizaciones’, a ‘generalizaciones’, a ‘determinismos’ que están estipulados como ‘correctos’, ‘naturales’ o simplemente ya nos hemos ‘acostumbrado a ellos’, y nos impiden percatarnos de cuan manipulados y programados estamos. Hay que ser hábil para percibir las sutilezas de un sistema que somete a cada humano desde que nace hasta que muere, a responder correctamente a su rol asignado. Y aún así quienes criticamos también solemos asumir muchas situaciones ad hoc.
La idea de este post es argumentar para quienes consideran exagerada a una persona que cuestiona incesantemente los estándares de género, que no lo es, y si bien voy a utilizar mayoritariamente las entradas del blog ‘Basta de sexismo’ que analiza con mayor profundidad parte de las cuestiones que veo de a diario, no implica que no sea lo que pienso. Justamente las escogí para que quien no tenga tiempo de leer todo el blog pueda acceder a los planteamientos más relevantes (según mi criterio, lo que no implica que sea lo mejor de dicho blog), pues muchas de sus entradas están a su vez explicadas haciendo referencia a estudios científicos y/o sociales, y a teorías nuevas que se aplican en la actualidad (recalco: nada de vetustas ideas).
Desde ya recomiendo fuertemente leer todo el blog “Basta de Sexismo” al que me refiero, y que sospecho, mes a mes aumentará en planteamientos, cuestionamientos y muestras de lo mucho que aún nos falta avanzar para considerarnos una sociedad 100% progresista.
La base de mi NO exageración
Una sociedad progresista definitivamente no tendría esencialismo en su cultura, rasgo que caracteriza a nuestra actualidad, y con el cual se determina la ‘decencia’ y la ‘rectitud’ de una forma más o menos inconsciente y generalizada.
¿qué es el esencialismo? (según “Basta de Sexismo”)
En mis palabras, el esencialismo es la aceptación y la completa afirmación de la existencia de virtudes y defectos innatos asociados a determinados géneros. Para que se comprenda su naturaleza indefendible es necesario entender que la discriminación es esencialista, como bien dice el blog linkado anteriormente. Nadie diría que los negros, por ser negros, tienen de manera innata la predisposición a ser esclavos, que los chinos son todos trabajadores, que los mexicanos son todos dormilones o que todo musulmán es terrorista, entonces ¿por qué se asume como si de verdad científica se tratase, aquellas estupideces de ‘las mujeres son más sensibles’, ‘los hombres son más violentos’? (Esta forma de pensar excluye la existencia de individuos sensibles e individuos violentos, cuya naturaleza no es producto de su género, sino de su personalidad, situaciones vividas, elecciones, etc). No ven en toda esa estructura la real causa de tales actitudes estereotipadas: nos crían desde todos los ámbitos a actuar como se estipula que debe ‘actuar’ alguien de determinado género. No sólo los padres a partir del mismo nacimiento nos condicionan (ver entrada que explica cómo antes de la infancia ya se comienza a instruir al futuro individuo y su comportamiento). Desde que nacemos nos sometemos a una simbología que favorece a marcar la diferencia (azul para niños, rosa para niñas, juguetes con corazones para niñas, estimulación de la gallardía y la abierta manifestación en los niños, la represión en el comportamiento y lenguaje de las niñas que son mal denominados como 'femineidad' (“una niña no se sienta así”, “una niña no dice malas palabras”, “¡qué mal que queda ver a una niña hablar o actuar con desenfado!” – dicen los tíos, los padres, etc). Y recalco, lo malo no es el comportamiento delicado, lo malo es denominarlo 'femenino', porque ya se está estereotipando y condicionando a las mujeres que no todas por naturaleza tienen dichos rasgos, así como los hombres no todos por naturaleza son rudos y violentos como dice el estereotipo de 'masculinidad'.
Este modelo de enseñanza es repetido por cada familia, porque es considerado decente y correcto que un futuro hombre o mujer actúen de la manera predeterminada socialmente, y por ende, la niña y el niño no sólo reciben este condicionamiento en el seno mismo de sus familias, sino también a través del entorno de amistades, de sus otros compañeros y compañeras, en la escuela misma, y por los medios masivos de comunicación. No hay opción para la elección a ser diferente. Y ESO es lo que yo critico. No quiero que se entienda que critico a quien gusta de usar faldas, sino al sistema y la mentalidad que generan de una forma u otra un ambiente de crítica destructiva y opresión indirecta para quien no guste de las faldas (por poner un ejemplo completamente banal, porque es obvio que con esta entrada pretendo decir algo más complejo que el derecho de usar o no faldas que ya no es obligatorio - a veces, según de qué institución se hable, claro está )
A lo que voy es que no se puede argumentar que quienes gustan de tener ciertos rasgos estándares sufran 'discriminación' por quienes luchan en contra de esta generalización de actitudes. Primero porque para discriminar se necesita poder, poder que no tienen las minorías que buscan salirse del estándar. La discriminación es una relación de desequilibrio entre dos personas donde una ejerce su privilegio por sobre la otra. Y segundo, si no tenemos una sociedad realmente libre de estándares para darle la libertad absoluta de decidir sus gustos a cada uno de los individuos (sin que éstos padezcan presión social y familiar, ridiculización por parte de otros, educación que le condicione según su género desde el mismo nacimiento, etc), nadie puede asegurar hasta qué punto la educación cultural impuesta es la que nos ha inducido a tener determinados gustos y a ser 'por naturaleza' lo que somos (entiéndase esto como comportamiento innato, personalidad u otro sinónimo).
Es evidente que nuestra sociedad no imparte una educación libre del condicionamiento de género. Por lo tanto, no se puede hablar de igualdad REAL.
Las diferencias ficticias
Además existe una estúpida actitud de mantener viejos estereotipos utilizando como justificación el “conocimiento científico”, creyendo que con tal argumento ya se da una verdad irrefutable, y quien estudia ciencia, sabe mínimo dos cosas:
Las personas de ciencia son humanas, y como tales, se encuentran (quieran o no) condicionadas por la sociedad que les rodea, la cultura, sus ideas, etc. Por ende, sus desarrollos teóricos, a pesar de que luchen contra eso, indefectiblemente tienen influencia de su esencia humana. Es así como Einstein – persona religiosa – se negó a aceptar las ideas probabilísticas que rigen la mecánica cuántica cuando alegó su memorable “Dios no juega los dados”, o el mismo Darwin, que observaba el comportamiento de los animales a través de sus ojos humanos, y daba a dichos animales, defectos y virtudes humanas.
Las teorías son modelos que describen la realidad de manera aproximada. Son hipótesis que no tienen una estructura completamente cerrada y permanente, sino que están en constante mejora, porque de eso se trata el desarrollo científico ( y más cuando a biología, sociología y psicología se refiere, que no son ciencias exactas ni predictivas, sino que son subjetivas, no deterministas y probabilísticas). Mantener conocimientos vetustos en la actualidad, sabiendo de nuevos descubrimientos, equipara a decir que el sol gira alrededor de la tierra sólo porque el sistema divino estructurado por la iglesia peligra al decir lo contrario, ya que se demuestra que el hombre no es el centro de ese universo creado y regalado por Dios.
Ejemplo de estos argumentos pululan por todos lados, y son más viejos que las pirámides, por ejemplo, el de la mítica diferencia entre el cerebro femenino y el masculino. (ver la entrada del blog “Basta de Sexismo” que comenta sobre la inexistente diferencia a partir del conocimiento de la plasticidad neuronal, que permite que cada cual tenga el cerebro que ''desea'' tener.)
Hay que recordar siempre que vivimos en un mundo corrupto, y el conocimiento que pone en tela de juicio intereses económicos y bien estructurados, tiende siempre a ser manipulado, boicoteado, y censurado. Ejemplo de ello se ve en las empresas de comunicación móvil y el completo desconocimiento de los efectos que causan en humanos la permanente cercanía de celulares a nuestro cerebro. Efectos, que por otra parte, tampoco se estudian con minuciosidad porque las empresas buscan evitar por todos los medios la solvencia de centros de investigación de tales características que puedan llegar a descubrir serios perjuicios (porque equivaldría a que el negocio dejaría de ser rentable inmediatamente o requeriría una inversión importante en busca de anular los efectos dañinos, en todo caso, implicaría un gasto que ninguna empresa está dispuesta a pagar. Mientras tanto, dejando las cosas tal cual están, la empresa se desliga de responsabilidad alguna ante cualquier efecto en los usuarios, ya que no hay investigación que constate fehacientemente tales efectos). Lo mismo se aplica a la ubicación de las antenas de telefonía celular en edificios de grandes ciudades, cuyos efectos padecen las personas, pero nadie se responsabiliza y mucho menos se investigan. Con esto intento explicar que porque un argumento lleve incorporado en sus frases un “comprobado científicamente” no implica una verdad absoluta, y muchas veces es sólo el uso de un conocimiento desactualizado, que continua así en tanto y en cuanto nadie se cuestione si aún en la actualidad las cosas investigadas continúan constatando dicho argumento. De todos modos no quiero desmerecer la ciencia, nada de eso. Sólo repito: no todo lo que se dice es así, y hay que cuestionarlo, porque muchas veces, es sólo manipulación de frases y conocimientos para continuar perpetuando un interés. O incluso a veces, estudios serios que se centran en explicar lo biológico netamente (como por ejemplo explicar que los hombres tienen un cromosoma XY y las mujeres un cromosoma XX) son manipulados por medio del lenguaje para enviar directa o indirectamente mensajes sexistas (por ejemplo, asociar superioridad por tener pene, teoría vetusta que sostenía la antigua psicología de principios del siglo XX, y por la cual explicaba un 'supuesto' sentimiento de incompletitud en las mujeres, cuando en realidad, dicho sentimiento era producto del sexismo agresivo que permanentemente sufría las mujeres de la época).
Pero continuando con el tema de las supuestas 'diferencias', se puede decir que éstas no existen más allá de las diferencias biológicas innegables a las que no se les debe asumir ni relacionar con actitud/virtud/defecto alguno: ‘los hombres tienen pene, las mujeres clítoris y útero’. Esto no implica para nada que los hombres son más estúpidos a la hora de la sensibilidad y que sólo gustan del sexo por el sexo mismo (les educan para ello, y se le festeja tal actitud a todo aquel que la repite como un autómata), ni las mujeres son todas madres en potencia, con el instinto maternal supurando por los poros y que no necesitan sexo, sino amor (se les enseña para que así sea, y se le admira y halaga tal actitud a toda aquella que la repite como una autómata) (ver entrada sobre del instinto maternal). Es por esto que cuando una mujer afirma su decisión de no tener hijos, inmediatamente es cuestionada, y se le pone en tela de juicio su condición de mujer con argumentos tales como 'una mujer no está completa sin un hijo' y cosas por el estilo que son permanentes presiones sociales producto de la estandarización que busco señalar para que seamos conscientes de ella, gracias a la cual me gano muchos comentarios del tipo “eso es una exageración”. Y NO lo es.
¿Nadie se da cuenta del condicionamiento permanente y diario al que se somete socialmente a cada uno de los individuos?.
Alguien podría decir que toda la cultura también es una imposición, pero la cultura, después de todo, la hacen los individuos que la componen y si una 'costumbre cultural' (como quieren llamar a la galantería) es dañina, se la modifica. Caso contrario aún estaríamos sacrificando vírgenes a los dioses, quemando científicos en hogueras divinas, o comprando personas negras como esclavos para el trabajo. Pero de esto hablaré luego.
Continuando con ejemplos de esencialismo básico se puede encontrar la tan gastada y roída frase de 'las mujeres son más lindas que los hombres por naturaleza' (ver entrada relacionada) argumento que inconscientemente pone en tela de juicio lo que significa ser mujer, o sea, ser bella. Si no eres bella, debes someterte a infinidad de procesos para alcanzar la belleza, porque sin que se den cuenta, al decir eso, se está afirmando que quien no es bella, no es mujer porque se generaliza con el uso de 'las mujeres'.
Esta belleza (característica que el sistema asocia como natural en las féminas) es lo que anualmente mata a miles de jóvenes y mujeres maduras que se someten a la cirugía estética precaria, a la anorexia, a la bulimia y sufren la depresión de no encontrarse en los estándares que el modelo impone. Y no digan que las personas bulímicas lo son porque eligieron por sí mismas serlo. Es cierto que nadie les apuntó con un revólver (el sistema no induce tan directamente), pero se las oprimió para ello – la sociedad destroza a quien no es 'convencionalmente atractiva'. No habría bulímicas si no se le exigiera a las mujeres la belleza que las condiciona – según el sistema – para catalogarse como mujeres. Para entender por analogía, si no hubiera clientes que exigen y demandan prostitutas, la prostitución no existiría. Si no hubiera consumidores de drogas que demandan mercancía, no existiría el narcotráfico. Por ende, si no hubiera sistema que exige mujeres bellas y delgadas, estos problemas sociales no existirían.
Y volvemos a lo que repetí durante toda la entrada. No estoy en contra de las mujeres bellas y delgadas, estoy en contra del condicionamiento social que le imponen a las mujeres a ser bellas y delgadas para darles esencia en sí mismas (las cuales reciben mejor trato que las 'feas', y producen que las 'feas' sean consideradas como repulsivas), como si de una masa uniforme se tratase y no se las concibe como individuos.
Algo similar ocurre cuando las personas se sorprenden de que una mujer realice/estudie determinada actividad no 'asociada' a su género. Una amiga mía por ejemplo, estudia ingeniería en mecánica. Cuando dice eso, las personas se sorprenden, debido a las estructuras sociales que condicionan la mentalidad de esta gente. Sorprenderse de que una mujer haga o estudie algo, implica que no se esperaba que hiciera tal actividad, porque se suponía que debido a su género no podría estudiar tal cosa. En cambio si hubiera dicho licenciatura en bellas artes, nadie se hubiera sorprendido, porque se tiene asumido gracias a este condicionamiento social, que las mujeres estudian cosas de esa índole. Y si esto no es un rasgo oculto machista, díganme qué es. La persona que no se sorprende de tal carrera, es porque asume que toda personas puede estudiar cualquier profesión.
Y explico antes de que alguien cuestione: el hecho de que la 'mayoría' de determinado género estudie determinada carrera es producto de este condicionamiento, no de la naturaleza de los individuos. No sirve alegar que algo es natural, cuando se toma como ejemplo una muestra/población que está condicionada con el comportamiento que se dice ser natural. Si es natural, no es producto del condicionamiento. No hay más que decir.
Y así, con un arsenal de frases esencialistas que determinan el rol a cada género, encontramos en este 'saber común / sentido común' comportamientos que también condicionan a los hombres.
Se les enseña a anular la sensibilidad, característica que siempre es blanco de burlas desde la más tierna infancia, y se les acostumbra a no exponerla utilizando para ello frases como la tan usada 'los varones / niños / hombres no lloran', o utilizando las bromas y las ridiculizaciones que padecen los adolescentes con gran sensibilidad o tendencia a ser cariñosos. Siempre el insulto predilecto de los 'machos' para usar contra estos jóvenes sensibles es el de denominarles 'homosexuales' en sus más despectivas variantes. Y no por nada utilizan esa denominación: ¿qué otra palabra pondría provocar ira/temor en un hombre, que busca aceptación social, que el trasladarle al mundo femenino, al cual el sistema considera negativo, débil, pasivo y carente de acción, cosas inaceptables en los nacidos con cuerpo masculino?. 'Maricón', es otra de las tantas denominaciones que condicionan al niño para obligarle a desear convertirse en un ser con poca sensibilidad y empatía para con el otro, y poseer mucha fuerza, mucho poder dominante -fomentando, en el caso extremo, el autoritarismo que muchas mujeres golpeadas experimentan por años- y adquirir condiciones para competir permanentemente. Esta presión que se hace en el niño en todos los ámbitos de su vida, y el mensaje constante de decirle que todo lo femenino es malo e indigno, producen en él el desprecio por la mujer (porque desprecia características que el sistema asocia a la mujer, pero NO son innatas de la mujer) y en busca de diferenciarse de lo 'indigno', adopta una conducta estándar ideal (denominada por el sistema como 'masculina') y repite el proceso en la crianza de su futura prole.
Por supuesto el caso contrario también se produce, pero con las niñas se utiliza otro argumento para reprimir su naturaleza y estandarizarla. La manifestación abierta en las mismas es considerada 'de machona' y además de tildarlas de 'masculinas' (cosa que no pueden ser porque el sistema estándar dice que una mujer no es desenfadada, no insulta ni se mueve bruscamente, características que el sistema asocia a lo masculino), se le amenaza con la peligrosa frase de 'ningún niño va a quererte si no te comportas como una nena'. Y he aquí el sistema machista fomentado desde la más tierna infancia. Las niñas educadas sólo para pensar en someterse a un hombre, y los niños, para ser competitivos y poderosos entre sí, a la vez que se les educa de alguna forma que las mujeres están a su disposición porque como entes enclenques que son, necesitan de un hombre para 'completarse'. Y si nadie nunca vio una situación como la que narro, vive en un termo enterrado en el núcleo de la tierra. (Conste que no asumo que toda persona vivió exactamente esto, pero no se puede negar que las frases siempre estuvieron y están en la crianza de infantes aún hoy día, aún cuando algunos se empecinan en creer que somos sociedad progresista al cien por ciento.)
En conclusión, mientras que al hombre se le castiga su sensibilidad, a las mujeres se les castiga su capacidad.
Y que no digan que es exagerada esta posición porque yo no sufra de sexismo directo, porque que yo no lo viva no implica que no lo denuncie cuando otros son afectados por sexismos de diversa gravedad.
Todo este sistema que busca fomentar el estereotipo en hombres y mujeres, donde se alimentan 'sabidurías de masa' tales como las mujeres sólo “desean” (nadie percibe que el sistema les impone) ser bellas para conquistar al hombre de sus sueños, sólo piensan en comprar zapatos, ropa, y accesorios inútiles y costosos, y que los hombres compiten entre sí para ver con cuántas mujeres se acuestan en una noche, y sólo piensan en fútbol y en costosísimos autos, está apoyado y retro-alimentado por mensajes subliminales que diariamente nos llegan a través de los medios gráficos en general, y los comerciales en particular.
Es así como vemos permanentemente en la publicidad la imagen de una ama de casa, con hijos y un marido idiota en los quehaceres hogareños, pidiendo ayuda a los productos de limpieza para realizar la tarea 'femenina'. Vemos permanentemente cómo los productos de higiene masculina o perfumes están asociados a la conquista de mujeres que no resisten el perfume a 'hombre' de X desodorante, quitándoles a las mujeres su esencia de humanos que puedan decidir sin tener que responder cual animales condicionados al mejor estilo Pavlov. Vemos permanentemente que los niños en las propagandas (además de ser TODOS blancos y casi siempre de ojos claros, pues nunca veremos un niño moreno de características indígena protagonizando un comercial que no sea de campaña de conciencia social) también tienen asignados sus roles: los niños investigan, se manchan, se manifiestan físicamente mientras que las niñas se dedican a ser suaves, delicadas, y sus juegos se basan en fomentarle su futuro estereotipo a seguir de ama de casa, madre y esposa.
Ni hablar de los comerciales cien por ciento sexuales, donde el físico y la esencia de la mujer es manipulada vilmente como un mero objeto que siempre está al servicio del hombre (ver entrada relacionada) .
Las publicidades de Axe manifiestan abiertamente esto cuando un gel de limpieza reza literalmente “si usas jabón de mujer, piensas como una mujer”y se ve un hombre proponiéndole casamiento a muchas mujeres que corren espantadas (En esa propaganda se muestra indirectamente lo que 'significa' ser mujer, ya el sistema se lo está diciendo. Si esto no es machismo, no sé qué lo sea)
Si este manoseo de la imagen y concepto de la mujer no se ve en los mensaje con los cuales los medios gráficos nos saturan permanentemente, realmente somos ciegos y sordos. Y definitivamente si alguien lo advierte, no creo que sea exagerado. El gran problema de aquellos que no ven esto, es probablemente por causa del gran privilegio que tienen o por causa de la costumbre a los estándares catalogados de 'decentes'. Y efectivamente no es curioso que sean mayoría mujeres quienes se quejan de estas actitudes, porque ‘afectan’ a las mujeres.
Que alguien no vea una situación sexista, no implica que no exista. Esta cuestión está muy bien planteada en la entrada del blog ‘the angry black woman’ que habla justamente de cómo los que tildan de exagerados a otros, son en realidad demasiado privilegiados como para ver lo que sucede, es decir, son miembros del grupo poderoso que no sólo no es discriminado, sino que se beneficia de la discriminación del grupo sin privilegios. Los privilegios sólo existen con respecto a otras personas que no los tienen, y es por esto que los hombres son los que menos notan el machismo, pues cuesta dejar a un lado los beneficios que la sociedad les da con respecto al otro grupo (poder, dominación, fuerza, etc).
Dicha entrada se puede leer en la versión traducida al español de la mano de Alfrodo: “La enojada mujer negra”
Porque decir exagerado es desvalorizar todos los argumentos que, aún evidentes, se niegan a ver o en el mejor de los casos, no advierten por absoluta ignorancia producto de su propio privilegio que les ha permitido no ser víctimas de tal abuso.
¿Es acaso exagerado lo que comenta esta entrada sobre el uso de la imagen de la mujer como objeto? ¿es exagerado hablar de la objetivización del cuerpo femenino como una mercancía al alcance de los hombres viendo comerciales como los siguientes?
* Comercial de Cerveza “Soy tuya”
* Comercial de alimento enlatado asiático
* Cinzano (descaro total)
* O video de música/comercial de Axe, que al entenderle resulta escalofriante e indignante. (no entiendo toda la letra, pero lo poco que entiendo me enerva, y no he podido conseguir la traducción del mismo)
¿Luego de ver esta pequeña muestra se puede seguir considerando exagerada a la persona que denuncia este uso vil del cuerpo femenino y de la mujer en sí misma?
Este pequeño espacio muestra más publicidades que involucran a la mujer como una mercancía más para el turismo o un objeto de placer masculino.
¿Es exagerado afirmar que no existe educación igualitaria de género cuando implícitamente la sociedad perpetua estereotipos como los que fomenta este otro comercial?
Este cortometraje reflexiona sobre cómo las publicidades favorecen a mantener estereotipos como los que vengo relatando y cómo condicionan a la mujer imponiéndole constantemente su lugar en la casa al servicio del hombre.
La industria publicitaria no es inocente e inofensiva. Las publicidades condicionan el comportamiento humano, no sólo repitiéndole a las personas la necesidad que tienen de adquirir determinado producto (cosa que realmente no necesitan, pero buscan generarle dicha necesidad) sino que en el camino de la venta del producto, se envían mensajes adicionales que terminan por ser asociativos, y desencadenan o apañan parte de esta cultura de objetivización y estandarización de la mujer desde ya detestable y la estandarización del hombre. (Ver entrada sobre efectos de a publicidad en el comportamiento)
Las sutilezas del machismo: caballerismo y adoración femenil.
El tema se resume fácilmente: si se es una persona que lucha por una sociedad igualitaria y equitativa, no tiene sentido fomentar el caballerismo, porque se estaría cayendo en un doble discurso. No se puede apoyar la igualdad y a su vez querer mantener una diferencia.
Si en cambio se es una persona que supone que el caballerismo es signo de amabilidad, gentileza o adoración para con el género femenino, creo poder desarrollar un argumento irrefutable.
El origen de la palabra caballerismo, sin lugar a dudas, proviene etimológicamente hablando de caballero. Los caballeros eran los guerreros armados que protegían tanto así a un noble como a una persona débil (recordando siempre que los nobles protegidos eran personas indefensas ante ataques físicos).
Su código de conducta les obligaba a socorrer permanentemente al individuo desfavorecido. Trayendo esto a la actualidad, podemos rápidamente advertir que los individuos desfavorecidos en la vía pública, por poner un ejemplo, son aquellos denominados 'especiales' o 'diferentes'. Una persona caballerosa dará su asiento a alguien lisiado o discapacitado, a una persona con limitaciones físicas o capacidades motoras limitadas (como reza los carteles de los medios de transporte). Ahora, ¿no es sospechoso ver que este comportamiento también se traslada a la mujer?. ¿Cómo pueden agradecer algunas mujeres que les consideren como personas limitadas por naturaleza, por el simple hecho de ser mujeres?. Algunas mujeres renegarán al leer estas líneas, y alegarán que con este comportamiento, los hombres demuestran 'cuan especiales' son las mujeres. Y no lo negaré. El hombre caballeroso, consciente o inconscientemente está demostrándole a dicha mujer y al resto de la gente, que por ser especial, necesita de cuidados especiales, o sea, necesita de las actitudes caballerosas. Ahora, no sé que tan agradable puede ser que le marquen a una mujer esta clase de especialidad si está completamente sana. Se está tratando a la mujer tan especialmente como se trata a los niños, a los discapacitados, a las personas con capacidades reducidas. Personas 'especiales'. (Recordaré cómo se usa este adjetivo en las frases de 'niños especiales', 'educación especial', etc)
Con lo cual, en una mujer sana y fuerte, esto es un sinónimo directo de inferioridad. Efectivamente el gesto caballeroso esconde en sí mismo, de forma inconsciente, el hecho de asumir que la mujer es un ser inferior al hombre.
No salgan a argumentar de que el hombre tiene más fuerza física que la mujer. No estoy hablando de que un hombre de 80 kilos pueda levantar cosas más pesadas que una mujer que pesa 60 kilos y nunca hizo algún deporte que le permitiera desarrollar su fuerza física (nadie lo compara con una mujer de igual peso y estatura que dicho hombre, en donde esa fuerza es comparable). Estoy hablando de que se hace diferencia en gestos que sólo esconden este mensaje despectivo hacia la mujer. ¿Acaso una mujer no es suficientemente capaz de esperar cinco minutos más el siguiente ascensor?, ¿una mujer no es capaz de abrir la puerta del auto o correr la silla en la que se va a sentar?, ¿ una mujer no es capaz de cargar las bolsas de su compra diaria, su mochila, o lo que sea que vino cargando durante dos horas?, ¿una mujer no es capaz de viajar sin estar sentada?, ¿no es capaz de pagar su propia comida?.
No sirven argumentos como el de gentileza que algunos exponen. La gentileza no hace diferencia de género, y por ende, una persona amable, tendría estos gestos tanto con hombres como con mujeres. Tampoco sirve el argumento de que las mujeres gustan de ese comportamiento. Primero porque no todas gustan de él, y segundo, porque quienes gustan de él, apoyan el machismo de forma consciente o inconsciente pues les gusta que no les consideren como par, y asumen esa inferioridad como algo natural en ellas, sin percatarse de que es el sistema quien se los ha metido en su cabeza. Resulta curioso ver cómo mucha de esas mujeres afirman que el gesto de caballerosidad es un privilegio para enaltecerlas, sin percatarse de la trivial contradicción en la que caen, pues jamás en nuestra sociedad patriarcal el querer caballerosidad puede ser visto como un gesto de entrega de poder a la mujer (porque la está diferenciando, la está colocando en un nivel inferior a la condición normal – hombre- y la hace 'especial' - mujer). Una mujer que recibe un gesto de caballerosidad por ser mujer nunca será para demostrarle a ésta el poder que posee en sí misma, sino todo lo contrario. La mujer que desea caballerosidad es probable que tenga la idea romántica de los roles de género tales como 'hombre fuerte y valiente que cuida y protege a su frágil, bella y endeble amada', ideas con las que se crían las niñas desde muy temprana edad a través de los cuentos infantiles (ver entrada relacionada al mensaje de los cuentos infantiles) y cuya influencia sigue recibiendo aún cuando alcanza la madurez a través de los medios de comunicación. Definitivamente la caballerosidad nunca ha sido mostrada en esta sociedad como un gesto de poder por parte de las mujeres, por lo cual es contradictorio hablar de esta diferenciación sexista como si de un privilegio se tratase.
¡Gente, NO existe igualdad y equidad si existen privilegios para un determinado grupo social!.
Y que nadie malentienda. No hablo de la gente con discapacidades como si de personas inferiores se tratase. El permitirles a estas personas ciertas facilidades, nada tiene que ver con considerarles inferiores (sólo tienen diferencias motrices/adiovisuales/etc). A través de estos gestos – denominados solidaridad – se busca la equidad de la situación que vive la persona discapacitada (y que no es ni privilegio ni discriminación) para ofrecerle una mejor calidad de vida en una urbanidad que no está pensada para ellas en lo más mínimo. Por eso remarqué con negrita que este tipo de comportamiento preferencial para con una mujer sana es un equivalente a decirle que su condición sana y natural es enclenque y por ende, es inferior a cualquier hombre sano.
Si gustan de una extensión de este tema, hallarán un excelente ensayo sobre esto aquí, del cual extraje parte de los argumentos usados.
Por lo tanto tampoco es exageración considerar el caballerismo como una muestra más de la diferencia; porque lo que hay que recordar es que el machismo no es un conjunto de situaciones aisladas, sino un sistema, un sistema que promueve la permanente diferencia, separándola en inferior y en superior, confrontándola (guerra de los sexos) y generando siempre un ambiente de casi competencia futbolera entre los géneros, donde siempre pierde el sexo femenino, no por casualidad, claro.
El feminismo por otro lado, no es un sistema que promueva las diferencias a favor de la mujer, sino que, en busca de luchar contra las diferencias en general, fomenta la igualdad, la equidad y la no estandarización de las personas. Siempre diré que el movimiento eligió mal su nombre, porque para evitar la mal interpretación de la cual se vale el machismo para desvalorizar todo lo que hace el feminismo, debió haberse denominado igualitarismo, para evitar que el machismo explotase la ignorancia de la gente, que asevera que feminismo es luchar por un matriarcado, donde el poder lo tienen las mujeres, y los hombres son sometidos. Nada más ignorante y lejos de la verdad que eso. Ese sistema se denomina “hembrismo”, pues es importante notar que estos sistemas que buscan la diferencia de género aluden a características animales (macho-hembra) y feminismo proviene de la calidad de fémina, en cuya etimología ya se puede apreciar el carácter de civilización/conocimiento/cultura que nos diferencia -por suerte – de los animales.
El feminismo aboga por la igualdad y equidad REAL de TODOS los humanos. No son un grupo de mujeres fomentando torturas aplicables a hombres. No. Es un grupo de personas (hombres, mujeres, travestis*, transexuales*, etc) que buscan una sociedad igualitaria y equitativa. NO una sociedad con individuos idénticos entre sí. Tampoco es válido el argumento que utiliza tal falacia, porque implica que quien lo usa no entendió nada: el feminismo acepta las diferencias existentes por ser individuos en sí mismos (no condicionados por género o estereotipo social – que nada tiene que ver con cultura o idiosincrasia-).
Repito: El feminismo busca una sociedad igualitaria y equitativa, NO individuos idénticos entre sí.
Si eso es exagerado, entonces no hablen de progresismo.
Otra actitud que está en disminución (lástima que sea por la falta de respeto al otro, no por una conciencia real de búsqueda de la igualdad entre géneros) es la de adorar a la mujer, y sostener toda una ideología que la presupone superior, cuando con las acciones o mismo con otros pensamientos incurre en contradicciones que demuestran otro rasgo más del machismo oculto en argumentos que simulan ser progresistas. La mujer no es un elemento a adorar, proteger y defender del mundo todo, porque ya se comentó anteriormente el argumento de inferioridad que tiene en su seno este doble discurso.
Menos agradable todavía es escuchar la ‘adoración’ de la mujer por parte de algunos por medio de los piropos: elemento machista si lo hay, con el cual se ha acostumbrado a muchas mujeres, que inconscientemente tienen la necesidad de escuchar la aprobación masculina (manifestada por medio del piropo) para sentirse mujeres, para sentirse valoradas. ¿No ven en el piropo el simple halago de su cuerpo como máximo valor a advertir en ella? (sea o no grosero, es el marcado del territorio, como explica esta entrada en el blog “Basta de Sexismo”).
La ven como un objeto de satisfacción, sin darle característica de persona. Es sólo un objeto para mirar. Nada más. ( y nada tiene que ver con la seducción, que son el conjunto de comportamientos que una persona dirige exclusivamente a la otra persona que le interesa. Los que dicen piropos o groserías no tienen la más mínima intención de seducir a la mujer a quien le dirigen su idiotez, y hasta es posible que muchos de ellos estén casados, favoreciendo a aumentar lo detestable de su acción, porque ni respeto a su pareja tienen, porque el sistema asume que los hombres tienen derechos sobre todas las mujeres)
Además, hay una cuestión muy bien explicada aquí, donde trata un asunto más respecto del piropo: no toda mujer está pidiendo la opinión de su físico a un hombre, y no tiene porqué escucharlo. Pero el sistema patriarcal en el que vivimos, asume que la mujer es sólo un objeto que 'embellece' la existencia del hombre, y como tal, éste tiene derecho sobre ella. La mujer, inconscientemente asocia el acto del piropo con su belleza, y como lo único deseable de ella para el hombre. O sea, comienza a identificarse como objeto. Y es así como vivimos en una sociedad (que aún algunas personas se atreven a considerarla 100% progresista en materia de igualdad de género) donde muchas mujeres viven en los centros de belleza y cirugía estética, en busca de la aprobación masculina, preocupándose más por su desarrollo estético que por sus capacidades intelectuales. Porque, seamos conscientes, no todas las personas tienen la misma personalidad, ni los medios ni la educación/información suficiente como para entender el funcionamiento perverso del sistema machista, y son víctimas de los estereotipos. Asumen que la belleza es igual a piropo, es igual a apreciación por parte del otro y es igual a conseguir una futura pareja, cosas que el estereotipo de mujer le impone (y que sea antes de los treinta años, porque sino ya no es mujer 'deseable'). Es aquí donde se nota sin lugar a dudas, la desigualdad en la educación de los géneros. Una mujer que no fuera educada para ello, no le importaría su belleza de manera tan obsesiva.
Pero claro, estas cosas que digo son producto de mi exageración (notar la ironía)
El piropo implica un desprecio completo hacia la mujer, porque el hombre asume que la mujer no es una persona, porque no acepta que puede no gustarle, porque insulta o se ofende si la mujer le contesta, y porque sólo la está considerando como un objeto. Eso NO es respeto hacia la mujer, mucho menos adoración.
Recomiendo fuertemente leer esta entrada para que adviertan lo que muchos no ven, y creen que favorecen a una especie de adoración a la mujer (y no vengan con el argumento de que ‘el piropo es parte de la cultura argentina o de otro país’, porque respondería cosas como ‘el sacrificio humano es parte de la cultura azteca/mexicana’, o ‘la decapitación por falta de respeto es parte de la cultura japonesa’ y estaríamos en igualdad de estupidez.)
Otro símbolo más de este machismo que busca ocultarse con argumentos de pacotilla, es el día de la mujer, algo de lo que ya había hablado antes (ver antigua entrada) razón por la cual no me extenderé, pero que considero mejor aún leer del blog ‘Basta de sexismo’, donde además señala el origen histórico de dicho día, y cómo se lo corrompió al punto de tornarse otro día más donde se da muestra del estereotipo impuesto. (Ver entrada de dicho blog)
Los extremos del machismo: violaciones, violencia, homofobia y prostitución
Desde ya, y pasando a otro extremo, las violaciones mismas son manifestación del machismo, no como una agresión de un individuo victimario hacia un individuo víctima, sino de hombres que agraden directamente a la mujer por tener asociado culturalmente que las mujeres son objetos disponibles para todo uso. Un mejor trato del tema se da en la siguiente entrada que pertenece al blog “Basta de Sexismo”. Allí explica con lujo de detalles el sistema perverso que favorece a la mentalidad que cree que la violación es causa de la víctima, que no es producto del machismo, y que es sólo una provocación de las mujeres a las cuales no les importa la violación (usar su cuerpo como un mero objeto para la descarga del agresor).
Y por supuesto la prostitución es el ejemplo más representativo de esa objetivización de la mujer, de considerarla un objeto de satisfacción masculina, y que por medio de este negocio, los clientes apaciguan su culpa al ‘contratar’ el servicio, haciéndose los desentendidos cuando se sabe que una gran mayoría de los trabajadores sexuales son individuos esclavos de mafias que venden y compran mujeres secuestradas. La otra parte de trabajantes sexuales son personas que no tuvieron alternativa alguna para sobrevivir (caso que se agrava cuando se trata de mujeres extranjeras originarias de países pobres y buscan sobrevivir en países ricos, donde además de ejercer la prostitución deben someterse a violencias discriminatorias y físicas). Otra entrada que recomiendo leer, (más allá de algunos ejemplos con los que no coincido) es la siguiente perteneciente al blog “Basta de Sexismo”, que es clara y concreta en los puntos relevantes del asunto.
La prostitución es el símbolo más triste de este sistema, porque pone de manifiesto toda esas justificaciones vetustas de que los hombres no pueden contener su deseo sexual, y las “mujeres decente” sí. Se evidencia la diferencia de educación entre géneros y la enseñanza que reciben los niños, donde sus experiencias sexuales comienzan en una gran mayoría en burdeles, favoreciendo a una división de las clases de mujeres: las prostitutas – con las cuales se hace todo lo que no se hace con la pareja, y son las mujeres con las que no se deben casar – y las mujeres decentes – con las cuales tienen hijos, se casan, y tienen una rutinaria vida. Como se puede ver, el hombre recibe una educación egoísta, que gira alrededor de su propio placer, olvidando el de su compañera a la que considera una propiedad más,y por ende asume tener la exclusividad sexual de ella, pero él, por su sola condición de hombre, tiene derecho a tener placer aún extramatrimonialmente. Un pequeño informe sobre cómo el machismo educa al hombre se pueden leer aquí (dicho informe puede tener un par de falencias, pero el argumento principal es aceptable).
El machismo establece cómo se debe comportar hombre y mujer, y es interesante ver hasta qué puntos estos estereotipos con los que se educa a cada individuo generan una homofobia inconsciente. Porque es evidente, que el machismo genera homofobia. ¿cómo se podría despreciar a un hombre amanerado si no existiera una regla/sistema colectivo inconsciente que establece el comportamiento 'decente' y 'correcto' asignado a un hombre? ¿cómo se le podría tener asco a una lesbiana si no existiera un sistema/regla que aseverara que las mujeres sólo pueden estar con hombre porque su única virtud es la de parir los hijos de los hombres?.
La homofobia es otra herramienta del machismo, con la cual se oprime a los individuos diferentes del estereotipo cuya naturaleza es totalmente coartada por la heteronomalización de los humanos y sus relaciones.
Es por ello que aún en estos días, cuando la tolerancia a las minorías se ha desarrollado un poco más (aunque aún es precaria) es común advertir el fenómeno de heteronormalización de las relaciones homosexuales. Las personas generalmente tienden a aseverar que en una relación homosexual uno de los miembros de la pareja 'hace' de 'hombre', mientras que el otro 'hace' el de 'mujer'. Aquí hay dos grandes cuestiones a tratar.
Primero, los homosexuales no son inmunes al sistema machista. Muchas parejas buscan insertarse en este sistema asumiendo un rol que no les queda del todo cómodo, pero que les resulta útil para que las demás personas entiendan su relación. (Quiero agregar que lo dicho no implica que no exista homosexuales con tendencias naturales a tener actitudes del estereotipo del género opuesto.)
Segundo, las personas no homosexuales tienen todo un sistema machista estructurándoles su concepto de individuo, por lo que le es imposible entender situaciones que no sean las de 'mujer-delicado', 'hombre-fuerte', o asociaciones estereotipadas de esa índole.
El machismo, aún aceptando la homosexualidad, sigue sometiendo a las mujeres. La homosexualidad masculina, al menos en Argentina, tiene mayor aceptación general que la femenina. Se puede ver claramente porque hay decenas de actores, cantantes, diseñadores, conductores, periodistas y un sin fin de hombres que han asumido su sexualidad abiertamente, y han roto estereotipos de amaneramiento o afectación en el comportamiento del prototipo 'gay', tan ridiculizado por el machismo, y resultan ser personas de éxito, con una vida profesional que les permite ser respetados gracias a lo cual se favoreció a una leve flexibilidad en el concepto del estereotipo de homosexual. Incluso existe una conocidísima travesti* que lidera y encabeza obras de teatro, participó en radio y en televisión y tiene una excelente aceptación pública: Florencia de la V cuyo blog está aquí, y de la cual, lamentablemente no quiero poner su información de la wikipedia porque no la respeta como humano, y no deja de tratarle como hombre. (aún mucho idiota pululando por ahí)
Ahora si se analiza el fenómeno en la homosexualidad femenina, sólo se encuentra vacío y silencio, y no es por casualidad. Existen un grupo de mujeres artistas de las cuales se sabe su sexualidad sólo por medio de rumores, pero nunca la aceptaron abiertamente. No quiero decir que todo el mundo tenga que hacer esto. Lo que digo es que ciertamente se castiga más a una mujer homosexual, que a un hombre homosexual. Porque el machismo, aún y aceptando a regañadientes esta diversidad, sigue despreciando a la mujer, porque la hace invisible. El sistema, por ser falocentrista, no entiende que una mujer puede estar completamente satisfecha con otra mujer, y genera argumentos usados tanto por hombres como por mujeres del tipo: “que manera aburrida de pasar el tiempo”, “ya la curará el hombre que le haga buen sexo”, “lo que hacen dos mujeres no se le puede llamar sexo” y variantes absurdas de gente obtusa donde buscan desvalorizar y ridiculizar a la lesbiana y su relación.
Y no es aceptable el argumento que a muchas personas se les hace creer que es que el lesbianismo es más estético y aceptado por los hombres. Nada más lejos de la verdad. El lesbianismo al que se refiere la persona que dice eso, es el lesbianismo pornográfico: más objetivización de la mujer, donde además de ser dos mujeres, está implícita la situación de que a posteriori un hombre se unirá a esa experiencia (o en su defecto un consolador, es decir, siempre está la presencia del falo imperando). Esta fantasía, además tiene que ver con un deseo del hombre de regresar a la heterosexualidad a estas mujeres, que se encuentran felices sin un hombre, y esto lastima seriamente al machista: es la búsqueda del honor de macho perdido, es la búsqueda del poder y el sometimiento de las mujeres desobedientes. Esta fantasía funciona de esa forma en los machistas. Por eso se cree que es más aceptada la homosexualidad femenina: Mientras un hombre participe en ella, la encuentra interesante, si las lesbianas le niegan su participación, ridiculiza la relación lésbica.
Gracias al machismo las lesbianas se encuentran siempre bajo cuestionamiento. Siempre se duda sobre su sexualidad, calificándola de bisexualidad (argumentando que la mayoría de las personas bisexuales son mujeres, y eso es una falacia gigante), no se le respeta su decisión, porque siempre hay hombres buscando 'revertir' su condición sexual, cosa que no sucede con los gays (en muy pocos casos alguna mujer ha intentado heterosexualizar un gay dándole una buena noche de sexo).
Cualquier acción hecha por la mujer que salga de los límites del estereotipo, de lo que 'debe' hacer una mujer, de lo que 'es' ser una mujer, produce el cuestionamiento del resto sobre su persona y en muchos casos su ridiculización.
Pero a lo que iba con el planteamiento de este otro aspecto del machismo, que muy pocos advierten, es que incluso en el seno mismo de la comunidad homosexual se encuentra el machismo fuertemente arraigado. La siguiente entrada del blog “Cultura Lesbiana” pone en evidencia lo dicho: en parte por buscar la aceptación de la comunidad heterosexual, se afirma con satisfacción que el desarrollo de los niños adoptados por parejas homosexuales es 'normal', sin darse cuenta que se está diciendo de forma implícita que la normalidad es ser heterosexual. La entrada hace un correcto planteamiento del error en que se está incurriendo actualmente al justificar que la adopción por parte de parejas homosexuales no altera el desarrollo sano de los niños, ya que éstos no tienen una sexualidad condicionada por la de sus padres, sino que son heterosexuales, como si la posibilidad de ser homosexuales siguiera siendo un error de la normativa, un desarrollo enfermo del individuo. Percatarse de ello y cuestionarlo muestra hasta qué punto el machismo sutilmente sigue ejerciendo su fuerza, estereotipando y condicionando a los individuos, diciéndoles lo que significa ser hombre o mujer.
Últimas consideraciones
Y finalmente, para terminar este desarrollo, recomiendo la entrada del blog ‘the angry black woman’ que explica brevemente porqué las personas que tildan de exageradas a otras, en estos ámbitos, son en realidad demasiado privilegiadas. Esta misma entrada se puede leer en español aquí gracias a la traducción de Alfrodo, y que copiaré aquí mismo debido a la claridad y brevedad del mensaje:
Aquello que no te afecta, normalmente no lo ves o entiendes.
En otras palabras, si tu piel es blanca, 99% de las veces el Racismo no te afectará. Por lo tanto, no verás o entenderás el racismo cuando suceda.
Si eres un hombre, 99% de las veces el Sexismo no te afectará, Por lo tanto, no percibirás el comportamiento Sexista cuando ocurra ni tampoco verás el Sexismo cuando es claro para otras personas.
Esto va para cualquier -ismo o fobia que se pueda pensar. Esto va para ti. Incluso si eres una minoría, cuando se trata de personas que no son com tú.
Lo que no te afecta personalmente frecuentemente no impacta en tu conciencia a menos que te hayas entrenado para ver y entender.
Por lo tanto, la siguiente vez que te sientas que declaras algo como "no racista" o "no sexista" o "no ofensivo", piensa si lo dices porque no eres una de esas personas que reciben el trato del racismo, sexismo u ofensas en comportamiento/palabras/acciones/imágenes.
P.D. Advierto que me faltó analizar algunas situaciones más (como por ejemplo el machismo en la biblia y otros) y no argumenté con todas las ideas que tengo, en parte porque el 99% de ellas las explican los links presentados a lo largo de esta entrada. Antes de criticar cualquier punto de esta entrada aconsejo que se lean todos los links expuestos para entender. Hice esto para que quien esté interesado en 'entender' (no digo en fomentar, no digo en adherirse), simplemente en enterarse de qué es en realidad esta ideología que fomenta la igualdad real entre géneros, pudiera acceder a un montón de material fiable y accesible que le permita, al menos, cuestionar la realidad imperante. Mi idea no es pegarle a nadie con estas ideas. Mi intención es hacer cuestionar lo que consideramos normal y correcto. Y por supuesto, esta entrada está dispuesta a recibir todo cuestionamiento y crítica constructiva. Si la cuestionan, habiendo entendido realmente todo lo expuesto, me sentiré una persona satisfecha.
“Lo más importante no es que pienses lo mismo que yo, sino que cuestiones lo tuyo, lo mío y lo del resto, por que el humano evoluciona sólo por medio del cuestionamiento”
Agradecimientos
Le agradezco especialmente a Alfrodo, Geli y Noir (en orden de entrega de la revisión, y sin querer alfabéticamente XD) que han revisado este artículo, han contribuido con sus conocimientos, con sus charlas y con material web linkado en este artículo.
* travesti - transexual: Debido a los regionalismos destaco que esta palabra aquí utilizada para nada tiene connotaciones despectivas. Al parecer en algunos países sí la tiene, y quiero aclarar. En cuanto a lo que a la RAE respecta, los travestis son personas que han optado por vestirse como lo hace el estereotipo del sexo opuesto al que pertenecen, sin haber experimentando intervención quirúrgica genital. Los transexuales son aquellos que sí se han sometido a una intervención quirúrgica genital para adquirir por este medio el sexo al cual pertenecen.Es más, existe una agrupación llamada ATTTA : Asociación de Travestis, Transgéneros y Transexuales Argentina (www.attta.org)
*Perdón. Los vínculos salieron coloridos, no se porqué *